Juan Pablo II.- Un Beato Amigo de los Desamparados. Capítulo II.- Curación Milagrosa de Metástasis Cancerígena Terminal al Higado
La Ciudad SULLATAMB; con gran cantidad de industrias, viven a sus alrededores los trabajadores que con su esfuerzo y talento hacen funcionar estas fábricas; naturalmente todos estos operarios tienen hogar con numerosas familias en algunos casos y en otros sin hijos y darían todo el oro del mundo por tener prole.
Aquí en la imagen observamos al Beato Juan Pablo II, muy bondadoso tocando la cabeza de su devoto Olzagon, derramándole sus bendiciones. Foto: Archivos del Blog: A vuelo de un quinde.
Ahora vamos al hogar de Juan Giraldo, quien tiene esposa y cinco hijos (tres hombres y dos mujeres), la cadena de edades va desde Juan Segundo con 19 años a Mónica de sólo 6 meses de edad; Don Juan trabaja en la Fábrica de Productos Metálicos "El Porvenir", la misma que está regentada por el empresario Santiago Fellini.
Don Juan Giraldo, es un obrero eficiente y muy estimado en la Fábrica, por su rendimiento que en algunos casos supera el promedio establecido por el Departamento de Producción, su salario es justo a lo producido y cubre los gastos elementales de su hogar; pero no le alcanza para ahorrar algunos centavos.
Un día cualquiera el Supervisor dio la oportunidad a Don Juan promoviéndolo a otro taller con más paga; pero estaba expuesto a absorber emanaciones nocivas volátiles, producidas por gases industriales en el proceso fabril, por lo que Don Juan tiene que usar obligatoriamente máscara de protección durante el turno de 8 horas de trabajo; de no hacerlo está expuesto a contraer cáncer a los órganos internos.
Sin embargo, éste operario acostumbrado a producir por encima del promedio, el uso de la máscara le impide una mejor visión en el manejo de taladros y corta metales; entonces, cuando no está el Supervisor de Fábrica; él, retira la máscara de protección y sigue trabajando con la cara expuesta absorbiendo los gases nocivos que van directo a los pulmones y cuando abre la boca van al estómago y los pulmones.
Entonces, ¿ por qué no obedece la reglas de protección, Don Juan?, tal vez lo hace por que tiene dos hijos que ingresaron a Universidad y sus estudios demanda muchos gastos que están fuera del presupuesto del salario que gana el obrero. Equivocadamente, Don Juan, piensa que mejorando su rendimiento le subirán el salario.
El empresario Fellini, es un hombre justo en los pagos a sus operarios, pero también no puede exceder en pagos a los índices de productividad y a la vez cumplir con las normas de seguridad establecida por los organismos reguladores.
Justamente, Don Juan al trabajar con la cara descubierta, está violando su seguridad y se está exponiendo a adquirir una grave enfermedad por la toxicidad de los gases, y como los gases son incoloros, el obrero no los puede ver, y repentinamente llega el Supervisor, quien al observar al operario sin protección le llama la atención y le advierte que puede ser suspendido en el trabajo, sino obedece las reglas de protección.
Pero, a su vez, a éste Supervisor le han aumentado su sueldo por el avance de la productividad, cuyo incremento fue producido por Don Juan; al fin de cuentas el Supervisor ya cumplió con la advertencia preventiva, si Don Juan insiste en su desobedencia, él se hará de la "vista gorda ", por que no puede despedir al mejor operario de la Fábrica.
Don Juan, después de 8 horas en su nueva ubicación, ha recibido tres bonificaciones extraordinarias por rendimiento récord en su puesto, incluso sigue su nombre expuestos en el Pizarrón de Méritos, ese dinero lo invirtió en el pago de pensiones de sus hijos universitarios; pero los gastos siguen subiendo y Don Juan, continua desobedeciendolo su protección, a cambio de lograr grandes rendimientos de productividad; pero aún así, cada vez está bajando en su eficiencia, su cuerpo ya no responde a las exigencias que ha sido sometido.
Desde hace varios días atrás, tiene problemas digestivos, ha perdido el apetito y algunas veces tiene mareos acompañados de vómitos, pero como su estómago está vacío ha perdido la cuarta parte de su peso corporal; cuando termina su tarea llega a su casa muy cansado, ya no conversa con su familia , ni participa de reuniones familiares; los terribles dolores al estómago le impiden ser el hombre sociable de antes.
Entonces, la esposa preocupada por la salud del esposo conversa con él, para que vaya a la Clínica sanitaria para darse un chequeo médico; pero, él, responde que es una pérdida de tiempo y no puede faltar al trabajo ni un minuto, por que le descontarán su salario.
Al día siguiente, llega muy temprano a la Fábrica, marca su tarjeta de ingreso y pasa directo al taller; al cambiarse de ropa y como tenía ese dolor lento a su estómago, le dio una mirada y observó una macha ligeramente de color castaño claro a rojizo alrededor de la ubicación del hígado; él se asustó en principio, pero como tocaron la campana del trabajo, su puso su camisa y pasó a su trabajo, solamente empezó a accionar el taladro y sintió que perdía el equilibrio cayó al piso y perdió el conocimiento.
Recordó recién después de tres días, estaba en una cama de la Clínica, allí estaba su esposa y algunos de sus hijos haciendo guardia, al verlo que abrió los ojos, todos ellos lloraron a la vez, no sabían como darle la mala noticia, esperaron por unos minutos y la esposa tocándole la cabeza con mucho cariño y afecto, le dijo:
--- Esposo mío, nos sentimos contentos de ver que hayas reaccionado al tratamiento médico, pero desgraciadamente te han detectado: CÁNCER TERMINAL AL HÍGADO, agravado con METÁSTASIS a casi todos los otros órganos internos......
La esposa no pudo continuar hablando, por que empezó a llorar desconsoladamente abrazada al cuerpo de su moribundo esposo y continuó su hijo Juan Segundo, quien agregó:
--- Querido Padre, los médicos te dan solamente entre 30 a 45 días de vida, por que el cáncer afectó todos los órganos vitales y está a punto de llegar al corazón, ese es el pronóstico médico; la Fábrica ha cubierto todos los gastos médicos, pero ellos también tienen un límite y ya nos notificaron que cubrirían los gastos hasta el mes siguiente y si continuas con vida, de allí en adelante seremos nosotros los que asumimos tu improbable curación.
Don Juan en uso de razón, entendió que solamente él, era el culpable de su enfermedad por no haber usado la máscara protectora, después de terminado el tiempo de visitas, se despidieron la esposa e hijos, con el compromiso que uno de ellos regresará en la noche para hacer guardia.
Estando sólo Don Juan. se puso a pensar la catástrofe familiar que sucederá a su descendencia al dejarlos desamparados y mirando al cielo se puso a rezar y en aquella concentración de la oración recordó la visita del Papa Juan Pablo II a su su ciudad, y cuando paseaba el Papa, él y un grupo de los vecinos los bendijo el "Papa Viajero" y todos se sintieron felices, episodio que tal vez nunca más se repetirá en la vida.
Su mente se despertó e imploró diciendo:
--- "Alma de Juan Pablo II, pídele a Dios que me perdone por haber sido un testarudo trabajando sin control y ahora tengo cáncer y moriré dejando desamparados a los miembros de mi familia, te suplico me ayudes".
Al terminar de orar Don Juan se quedó pofundamene dormido y en ese estado tuvo un sueño con la visión de un Gran Señor vestido de blanco como un médico, quien haciendo una imposición con ambas manos sobre el estómago, y Don Juan sintió un tremendo calor a esa parte de su cuerpo, y le dijo:
--- "Juan te has arrepentido de algo benigno, porque tu siempre has sido y eres un gran padre, Dios muy generoso y con su gran poder, por que para él nada es imposible y tu fe te ha salvado, ya no tienes más ese mal que afligió tu cuerpo y cuando regreses a tu trabajo, no seas tan testarudo como tu mismo lo reconoces y respetas las reglas de protección obligatorias".
Don Juan continuó durmiendo plácidamente y al llegar su hijo pasadas las 20:00 horas del día, para hacer la guardia a su padre, lo encontró profundamente dormido y con un semblante risueño no hizo ningún ruido y se acomodó sobre el sillón, y también se durmió hasta que ambos se despertaron a las 5:00 a.m. de la madrugada, ya era un nuevo día de esperanza y alegría.
Don Juan jubiloso era otra persona, había desaparecido el terrible e insoportable dolor al hígado y ya no tenía los insoportables vómitos y al ver a su hijo, le dijo:
--- Anoche tuve un maravilloso sueño de sanación hijo... Dios ya me salvó y seguiré con ustedes...
El hijo muy incrédulo, sabiendo el terrible mal de su padre, le siguió la corriente, pensando que estaba desvariando incoherencias, para no desanimarlo, a las 6:00 a.m. llegó la bióloga para tomar muestras de sangre y analizar el avance del cáncer en el cuerpo del paciente, por que todas allí sabían que era un "mal terminal" con míninas y casi nulas probabilidades de curación.
El hijo quiso impedir que se le sigan sacando sangre a su moribundo padre, pero Don Juan reaccionó y dijo:
--- No te preocupes hijo, la bióloga hace su trabajo, ella solo confirmará que estoy sano
La profesional médica y el hijo de don Juan se miraron en señal de comprobación del desvareo del moribundo; luego de tomar las muestras se fue al laboratorio y al colocar algunas gotas de sangre al microscopio ya no existían los virus del cáncer.
La bióloga tan sorprendida e incrédula volvió a repetir el análisis con otras gotas de sangre y confirmó lo que había visto antes:
¡¡¡ Caramba !!!
Se dijo ella misma, y siguió:
¡¡¡ Esto si que es un milagro !!!
Pero temiendo que el microscopio estaba fallando, se fue a otro laboratorio muy sofisticado dentro de la misma Clínica y con la ayuda de un colega confirmó las pruebas:
"¡¡¡ No hay Cáncer !!!"
Mientras tanto Don Juan y su hijo conversaban muy alegres, esperando los resultados de los análisis de la bióloga y efectivamente ella retornó y dijo:
--- Don Juan, está usted curado no tiene cáncer, así lo dice el laboratorio, yo hasta ahora no lo puedo creer.......
El enfermo casi interrumpiendo a la profesional médica y mirando al Cielo, exclamó:
¡¡¡ Este es un Milagro de Juan Pablo II !!!
¡¡¡ Gracias Dios mío me has salvado !!!
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